Santoral del 14 de Mayo



INDICE

Santa MARÍA DOMINICA MAZZARELLO. (1837-1881).
San MATÍAS "Apóstol". s. I.
San MÁXIMO DE ÉFESO. M.c.250.
Santos FÉLIX y FORTUNATO. M. 294.
San GALO I DE CLERMONT. (c.489 - c.553).
San CARTAGO “el Joven”. (c.555 - c. 637).
Beato GIL DE SANTAREM. (c.1190 - 1265).
Santa TEODORA GUÉRIN. (1798-1856).
San MIGUEL GARIKOITZ. (1797-1863).
OTROS SANTOS DEL DIA
VIDEOS
Santos: Isaac, Víctor, Corona (Estefanía), Félix, Cecilio, Poncio, Isidoro, Justa, Justina, Enedina, mártires; Claudio, Pacomio el Joven, Pomponio, obispos; Miguel Garicoits, fundador; Vicenta Gerosa, santa-San Sabino, Mártir -San Eremberto de Toulouse


SAN BONIFACIO, Mártir 
Así como habéis empleado los miembros
de vuestro cuerpo en servir a la impureza y
a la injusticia para cometer la iniquidad,
así ahora empleadlos en servir
a la justicia para santificaros.
(Romanos, 6, 19).


San Bonifacio vivía en pecado, en compañía de una dama romana llamada Aglae, de quien era administrador. Un día esta mujer, movida por la gracia, lo envió al Oriente para que procurase reliquias de mártires. "¿Qué dirías, - le dijo Bonifacio al partir-, si te trajesen mi cuerpo por el de un mártir? ¿Lo recibirías?" Llegado a Tarso, vio cómo un gran número de mártires soportaban jubilosamente los más crueles tormentos. "¡Ah -exclamó- qué grande es el Dios de los cristianos, qué grande el Dios de los mártires! Servidores de Cristo, rogad por mí para que, unido a vosotros, yo también combata a los demonios". Y, en efecto, confesó que era cristiano y, después de muchas torturas valientemente soporta das, fue decapitado.

MEDITACIÓN SOBRE LA CONVERSIÓN DE SAN BONIFACIO

I. Por muy entregado que estuviera al pecado, Bonifacio se distinguía por su caridad. Daba hospitalidad a los viajeros sin recursos, e iba, de noche, por calles y plazas, socorriendo a los pobres. ¿No te has hecho culpable de faltas contrarias a la pureza? Trata, mediante una tierna caridad para con los pobres, de atraer sobre ti la gracia de Dios. La limosna libra del pecado y de la muerte, e impide que el alma caiga en las tinieblas. (Tobías).

II. El arrepentimiento de su cómplice dio principio a la conversión de Bonifacio; la vista de los mártires la terminó. Acaso leyendo el relato de los suplicios de los mártires hayas exclamado: "¡Qué grande es el Dios de los cristianos!" Pero, ¿te ha conducido esta admiración a imitarlos sufriendo con paciencia, por lo menos las pruebas ordinarias de la vida? Las solemnidades de los mártires son exhortaciones al martirio. Tengamos la valentía de hacer lo que nos complacemos en alabar. (San Agustín).

III. Cuanto más grande sea la falta, más severa debe ser la penitencia. Contempla a Bonifacio recién convertido. Se le destroza el cuerpo, húndensele agudas cañas por debajo de las uñas, se le vierte en la boca plomo derretido, y no cesa él de repetir: Gracias os doy, Señor Jesús, Hijo de Dios. Recuperemos, como él, el tiempo perdido, mediante el fervor de nuestra penitencia. Y si fuimos para los demás ocasión de pecado, tratemos de reparar con nuestros buenos ejemplos, el mal que les hayamos hecho. Así fue como Anglae quedó firme en el bien por el martirio de Bonifacio. Colocó sus venerables restos en una tumba en la vía Latina, y, junto a ella, hizo construir una celda donde en medio de austeridades pasó los últimos quince años de su vida.

El buen ejemplo
Orad por los que habéis
escandalizado.

ORACIÓN

Dios omnipotente, haced, os lo suplicamos, que celebrando la solemnidad del bienaventurado Bonifacio, vuestro mártir, merezcamos ser ayudados por su intercesión ante Vos. Por J. C. N. S. Amén.



San MATÍAS "Apóstol". s. I.


Martirologio Romano: Fiesta de san Matías, apóstol, que siguió al Señor Jesús desde el bautismo de Juan Bautista hasta el día en que Cristo subió a los cielos, y por esta razón, después de la Ascensión del Señor, fue puesto por los apóstoles en el lugar que había ocupado Judas, el traidor, para que, formando parte del grupo de los Doce, fuese testigo de la resurrección
En los Hechos de los Apóstoles se describe la elección de Matías para ocupar el puesto de Judas Iscariote. Pedro hizo esta proposición: "De entre los hombres que nos acompañaban todo el tiempo que convivió con nosotros el Señor, desde el bautismo de Juan hasta el día de su ascensión, hace falta uno de ellos se asocie, como testigo de su resurrección. Presentaron a dos: a José, apellidado Barsabá, por sobrenombre el Justo, y a Matías. Y rezaron diciendo: Señor, Tu que penetras los corazones de todos, muéstranos cuál de los dos has elegido, para que ocupe este servicio apostólico. Echaron suertes y cayo la suerte sobre Matías y fue asociado a los 11 apóstoles" (At 1, 15-26)

El número doce tenía un alto significado místico en la Biblia. Doce como las doce fuentes de Elim. Como los doce panes de la proposición. Como las doce puertas de la Jerusalén celestial. Como los doce hijos de Jacob. Como los doce cimientos de la muralla de Jerusalén. Como las doce piedras preciosas del pectoral sacerdotal: una sardónica, un topacio y una esmeralda. Un rubí, un zafiro y un diamante. Un ópalo, un ágata y una amatista. Un crisolito, un ónice y un jaspe.
Según Eusebio, Matías era uno de los 72 discípulos de Cristo. Según los apócrifos "Hechos de Andrés y Matías", fue hecho prisionero en la tierra de los antropófagos; luego, cegado y curado milagrosamente y fue liberado por san Andrés, y por fin decapitado (se le representa con el hacha) en Etiopía o Jerusalén. Los menologios griegos narran que Matías evangelizó Capadocia y en las costas del mar Caspio y que murió lapidado. Debió sufrir grandes durezas y trabajos entre los pueblos tan salvajes. El mismo autor dice que fue martirizado en Etiopía. Sus reliquias se conservan en la basílica de Santa María la Mayo de Roma y en Tréveris, Alemania. Patrón de Hannover, Hildesheim y de la diócesis de Tréveris. FIESTA
INDICE


San MÁXIMO DE ÉFESO. M.c.250.


Martirologio Romano: En Asia, provincia de Turquía, san Máximo, mártir durante la persecución bajo el emperador Decio y de quien se dice que murió lapidado

Era un mercader de Éfeso, que en el 250, cuando fue publicado el Edicto de Decio contra los cristianos, se presentó al juez declarándose cristiano y fue martirizado. Es uno de esos cristianos espontáneos, y así lo manifiesta "precisamente me he manifestado cristiano para salir, en fin, de esta vida miserable y temporal y alcanzar la eterna".
Sus «Actas» recibieron de Ruinart la calificación de «sincera», genuinas. Se trata de un diálogo «oficial» entre el procónsul Óptimo y Máximo, cristiano:
El procónsul Óptimo le preguntó su nombre y condición social. El mártir respondió: «Máximo. Nací libre, pero ahora soy esclavo de Cristo.»
Óptimo: ¿En qué te ocupas?
Máximo: Soy un hombre del pueblo y vivo del comercio.
Óptimo: ¿Eres cristiano?
Máximo: Sí, aunque indigno de serlo.
Óptimo: ¿Estás al tanto de los recientes decretos de los invencibles emperadores?
Máximo: ¿Qué decretos?
Óptimo: Los que ordenan que todos los cristianos abjuren de la superstición reconozcan al verdadero y supremo príncipe y adoren a los dioses.
Máximo: Sí, conozco ese decreto del rey de este mundo y, por ello he venido a entregarme.
Óptimo: Ofrece sacrificios a los dioses.
Máximo: Yo sólo ofrezco sacrificios al Dios único, a quien me he sacrificado gozosamente desde la infancia.
Óptimo: Si ofreces sacrificios, te pondré en libertad. Si no, te condenaré a la tortura y a la muerte.
Máximo: Es lo que siempre he deseado. Si me entregué, fue precisamente para cambiar esta vida miserable por la eterna.

El procónsul mandó a los verdugos que azotasen a Máximo. Como esto no produjese ningún efecto, los verdugos le colgaron en el instrumento de tortura llamado el «potro». Pero como el mártir permaneció inconmovible, Óptimo pronunció la sentencia de muerte: «Máximo se ha negado a obedecer a la ley y a ofrecer sacrificios a la excelsa Diana: por ello, la Divina Clemencia (es decir, el emperador) le condena a ser lapidado para que su muerte sirva de escarmiento a los otros cristianos». Máximo fue apedreado fuera de la ciudad y murió mientras glorificaba y daba gracias a Dios.

Los hechos parece que ocurrieron en la persecución de Decio, hacia el 250, y quizás (pero con muy poca seguridad) en la ciudad de Lampsaco. Siempre será difícil para nosotros comprender, no ya el "ansia de martirio" (que se ha dado en todas las épocas) sino esta auto entrega a las autoridades, que se dio con bastante profusión en los primeros siglos, y que la Iglesia prohibió luego explícitamente.
INDICE


Santos FÉLIX y FORTUNATO. M. 294.


Martirologio Romano: En Aquileya, en el territorio de Venecia, santos Félix y Fortunato, mártires, cuya ciudad honraron con su glorioso martirio

La noticia que traía el Martirologio Romano antiguo sobre estos mártires decía: «En Aquileya, la pasión de Santos Félix y Fortunato, que perecieron durante la persecución de Diocleciano y Maximiano. Después de colgarlos en los postes, les aplicaron antorchas encendidas en los costados, pero el poder de Dios las extinguió: se les arrojó entonces aceite hirviente y, como ellos insistieran en confesar a Cristo, fueron, por fin, decapitados». También traía otros dos mártires del mismo nombre, junto a un tercero llamado Aquileo, a quienes honraba el 23 de abril, pero la fecha, la forma y el lugar del martirio, eran completamente distintos a los de hoy. De todos modos, elNuevo Martirologio Romano ha resuelto el problema eliminando la duplicación, y dejando sólo a los de Aquileya, que tienen a su favor buenos testimonios de historicidad.

En efecto, no se puede dudar de que el Fortunato en cuestión haya sido un auténtico mártir: No sólo le localiza claramente el "Hieronymianum" como un residente de Aquileya, sino que el poeta Venancio Fortunato (c. 590) se refiere a los dos mártires con estos versos: "Felicem meritis Vicetia laeta refundit/ Et Fortunatum fert Aquileia suum". (La alegre Vicenza devuelve a Félix en méritos,/ y Aquileya se lleva a su Fortunato.)

Además, en Vicetia (Vicenza) se descubrió una antigua inscripción con las palabras: «Beati martyres Felix et Fortunatus». De acuerdo con sus «actas», ambos hermanos fueron naturales de Vicenza, pero fueron martirizados en Aquilea. Los cristianos de Aquileya recuperaron sus cuerpos y los sepultaron en lugar honorable; pero los fieles de Vicenza acudieron al punto a reclamar las reliquias y, para arreglar la disputa, se llegó al compromiso de que los restos de Fortunato quedasen en Aquileya y los de Félix fueran trasladados a su ciudad natal.
INDICE


San GALO I DE CLERMONT. (c.489 - c.553).

Martirologio Romano: En la misma ciudad, san Galo, obispo, tío paterno de san Gregorio de Tours, varón humilde y bondadoso

Natural de Clermont en Auvernia (Francia), en el seno de una familia distinguida. Fue curado milagrosamente. Cuando llegó a la edad de contraer matrimonio, su padre le propuso que se casase con la hija de un senador. Pero Galo, que había ya resuelto consagrarse a Dios, huyó de la casa paterna y pidió ser admitido en el monasterio de Cournon. El abad se negó a admitirle sin el consentimiento de su padre. No sabemos cómo, el joven se las arregló para convencer a su padre y fue admitido en la abadía.

Fue ordenado diácono por san Quinciano, obispo de Clermont Ferrand, quién le envió como su representante a la corte del rey Teodorico I. El joven, que poseía una voz extraordinaria, pasó a formar parte del coro de la capilla de Teodorico I. Quinciano murió hacia el año 526, y Galo fue elegido para sucederle en el gobierno de la diócesis.

En el 527, tomó posesión de su sede de Clermont. Se distinguió por su caridad, humildad y dulzura. La virtud característica de nan Galo era la mansedumbre, como lo demuestran varios incidentes. En cierta ocasión, un hombre le golpeó en la cabeza; el obispo no mostró enojo ni resentimiento alguno sino con su mansedumbre desarmó al agresor. En otra ocasión, un tal Evodio, que había abandonado el senado para recibir la ordenación sacerdotal, se dejó llevar por la ira y trató a su obispo en forma desacomedida. San Galo no respondió una sola palabra; sencillamente, se levantó de su cátedra y partió a visitar las iglesias de la ciudad. El hecho conmovió tanto a Evodio, que fue en busca del santo y le pidió perdón de rodillas, en la calle. Fue tío y maestro de san Gregorio de Tours. Se aseguró que en su funeral participaran muchos judíos.
INDICE


San CARTAGO “el Joven”. (c.555 - c. 637).

Martirologio Romano: En Lismore, en Irlanda, san Cartago, obispo y abad

Nació en el Kerry, y era hijo de Fingen, perteneciente a la tribu de los kiarregi. Cambió su verdadero nombre, Moccuddy, en el de Carthac en homenage al obispo san Carthac el Viejo, que tanta parte había tenido en su formación juvenil. Fue ordenado sacerdote hacia el 580, entonces se retiró con algunos compañeros al eremo de Kiltallagh en su pueblo natal, donde se quedó 14 años y construyó una celda en Kiltallagh, donde su fama pronto atrajo peregrinos. Después de algunos años, los celos de dos obispos vecinos lo obligaron a dejar su ermita, y pasó al célebre monasterio de Bangor, cuya escuela atraía a los estudiantes de toda Europa continental y era el primer centro intelectual de Irlanda.

Por consejo de san Comgall volvió a Kerry y fundó iglesias en Kilcarragh y Kilfeighney. Luego visitó Waterford, Clonfert-molua (Kyle), y Lynally, desde donde, por recomendación de san Colman Elo, marchó a establecerse en Rahan, cerca de Tullamore, en el actual King's County.

En el 595, fundó el monasterio de Rathin (actualmente Rahen) en el condado de Westmeath, donde acogió a un gran número de discípulos. Fue abad mitrado y escribió una regla monástica en verso en lengua irlandesa. También se le atribuyeron numerosos milagros. Al fin Blathmaic, un príncipe de Meathia, instigado por los monjes vecinos, ordenó a san Cartago dejar Rahan. Esta expulsión del santo y ochocientos monjes de su comunidad, tuvo lugar en la Pascua del año 635, poco antes de su muerte.

Viajando por Saigher, Roscrea, Cashel, y Ardfinnan, san Cartago al fin llegó a orillas del río Blackwater, donde el Príncipe de los Decios le dio el terreno para una fundación, y así fundó el monasterio-escuela de Lismore, que pronto llegó a ser una ciudad y de cuya diócesis Carthac fue el primer obispo. Grande como era la fama de Rahan, fue eclipsada por completo por la de Lisemore, aunque san Cartago vivió menos de dos años en su nueva fundación. Pasó los últimos dieciocho meses de su vida en la contemplación y la oración, en una cueva cerca de la actual St Carthag's Well. Cuando llegó el momento de la muerte, llamó a sus monjes y les dio su exhortación de despedida y bendición. Murió poco después de erigir la catedral. La pureza fue su virtud más trascendental, y para protegerlo practicó las más severas penitencias
INDICE


Beato GIL DE SANTAREM. (c.1190 - 1265).

Martirologio Romano: En Santarem, en Portugal, beato Gil de Vaozéla, presbítero, que como profesor de medicina en París se entregó a una vida disoluta, pero, una vez convertido, ingresó en la Orden de Predicadores, en la que se esforzó en rechazar, con lágrimas, oración y sacrificios, todas las tentaciones

Nació en Vaozela (diócesis de Viseo, Portugal), siendo su padre el noble Rodrigo Pelagio Valladares, que al ser un segundón lo dedicó a la carrera eclesiástica. Gil estudió en Coimbra, donde se distinguió mucho por su brillante inteligencia. El rey le concedió una canonjía y otros beneficios. Pero el joven se interesaba más por las ciencias experimentales que por la teología y decidió estudiar medicina en París. Poco después de emprender el viaje, le alcanzó por el camino un forastero (el beato pensaba más tarde que era el demonio en persona), quien le invitó a ir a Toledo en vez de proseguir el viaje a Francia. Gil se quedó, pues, en Toledo, donde no sólo estudió alquimia y física, sino que se interesó también por la nigromancia. Según parece, se entregó ahí a todos los vicios y llegó incluso a hacer un pacto con el diablo, firmado con su propia sangre. Siete años después, pasó a París, donde practicó la medicina con gran éxito. Allí conoció a santo Domingo de Guzmán y su ejemplo hizo que la voz de su conciencia empezó, por fin, a hacerse oir. Una noche Gil tuvo un sueño en el que un espectro gigantesco le gritó: «¡Cambia de vida!» «¡Cambiaré de vida!», exclamó Gil al despertar. Y cumplió su palabra, ya que al punto quemó los libros de magia, destruyó los frascos de ungüentos y emprendió, a pie, el viaje a Portugal.

Con los pies ensangrentados y medio muerto de fatiga, llegó al fin a la ciudad de Valencia, donde los dominicos le recibieron hospitalariamente. Gil aprovechó la ocasión para confesarse. Poco después, tomó el hábito. El resto de su vida fue de lo más edificante. Naturalmente, no le faltaron ataques del demonio y el recuerdo del pacto que había hecho con él le hacía temer mucho por su salvación; pero, con la gracia de Dios, perseveró en la oración y la mortificación. Siete años después, tuvo una visión en la que Nuestra Señora le devolvió el pacto que había firmado con su sangre y, a partir de entonces, vivió en paz. Poco después de su profesión, los superiores le enviaron a la ciudad portuguesa de Santarem

Más tarde, estuvo en un convento de París, donde se hizo muy amigo del beato Humberto de Romans, futuro maestro general de la Orden de Predicadores. Tuvo una gran familiaridad con el beato Jordán de Sajonia siendo ya Maestro de la Orden. De él habla abundantemente fray Gerardo de Frachet en “Las Vidas de los frailes”.

Vuelto a su patria se dedicó a la predicación con gran asiduidad, llevando una vida ejemplar con lo que atrajo a muchos, especialmente a los más descarriados, al camino de la salvación, donde llegó a ser provincial de Coimbra y Santarem. Fue prior provincial de la provincia de España dos veces entre los años 1233-1249. Fue un fraile de eximia santidad, autoridad y gran formación intelectual. Dios le favoreció con frecuentes éxtasis y con el don de profecía. Al momento de su muerte en el convento de Santarem, pidió ser revestido de cilicio y puesto sobre el pavimento y así dirigió a los frailes palabras de mucho consuelo. Sus reliquias se encuentran hoy en San Martino do Porto, cerca de Lisboa, en una casa particular. Su culto fue aprobado en 1748.
INDICE



Santa TEODORA GUÉRIN. (1798-1856).

Martirologio Romano: En la aldea de Saint Mary of the Woods, de Indianápolis, en los Estados Unidos de Norteamérica, santa Teodora (Ana Teresa) Guérin, virgen de la Congregación de las Hermanas de la Providencia, la cual, oriunda de Francia, residió y murió en esa pequeña ciudad. Era de naturaleza compasiva, y aún en medio de las mayores dificultades confió siempre en la divina providencia, preocupándose con solicitud de la naciente comunidad

Nació en Etables (Francia). Su padre prestaba servicios en la Armada de Napoleón. Su progenitor fue asesinado y la familia cayó en la penuria, esto llevó a Ana Teresa a una fe profunda en Dios de la que nunca dudó. En lo más hondo de su alma, sabía que Dios estaba con ella, que siempre estaría con ella, como una compañía constante.

Con 25 años de edad ingresó en las Hermanas de la Providencia de Ruillé-sur-Loire, una joven comunidad de religiosas que servían a Dios brindando oportunidades para la educación de los niños y cuidado de los pobres, enfermos y moribundos.

Fue enviada a Estados Unidos. El propósito consistía en establecer un convento, fundar escuelas y compartir el amor de Dios con los pioneros de la diócesis de Vincennes, en el Estado de Indiana. Su salud era débil y tenía dañado el sistema digestivo de tal manera que durante el resto de su vida sólo pudo consumir alimentos y líquidos suaves y blandos. Estuvo a punto de rechazar la misión, pero la oración y la obediencia le resolvieron todas las dudas.

En 1840 llegaron a la sede de su misión en Saint-Mary-of-the Woods, que era una cabaña infecta. Durante sus primeros años, la madre Teodora debió soportar numerosos problemas: el prejuicio contra los católicos, traiciones, malentendidos; la ruptura de las Congregaciones de Indiana y de Ruillé; un devastador incendio que destruyó una cosecha completa, dejando a las hermanas desprovistas y hambrientas; frecuentes enfermedades mortales, pero ella decía “Si alguna vez esta pobre y pequeña comunidad logra asentarse definitivamente, lo hará sobre la Cruz: eso me infunde confianza y me brinda esperanza, aún frente al desamparo”. En menos de un año su comunidad floreción y ella fundó la Academia de la Congregación. Siempre se destacó por su humildad y entrega sin límites a la Providencia y los hermanos. Murió en Nemus (Estados Unidos).
INDICE



San MIGUEL GARIKOITZ. (1797-1863).

Martirologio Romano: En el lugar de Bétharram, cerca de Pau, en los Bajos Pirineos de Francia, san Miguel Garicoïts, presbítero, que fundó la Congregación de Presbíteros del Sagrado Corazón de Jesús)

Nació en la pequeña aldea de Saint-Juste (Bayona) en el seno de una familia de campesinos vascos; su familia prestó auxilio a los sacerdotes perseguidos durante la Revolución Francesa. Aprendió español y vascuence en la escuela de su pueblo. En su adolescencia trabajó cuidando ovejas y luego se colocó como pastor en casa de un rico propietario en Oneix, en el cantón de Saint-Palais. Se portó tan bien que sus amos le triplicaron el salario. Por sus palabras llenas de sabiduría le llamaron "Doctura" (el pequeño doctor). En los tres años de trabajo en soledad maduró su vocación sacerdotal. Su abuela le recomendó a un sacerdote, Juan Bautista Borda, que había ayudado durante la revolución; y a cambio de la instrucción escolar trabajó como siervo del párroco y después del obispo de Bayona.

Estudió en el seminario de Aire y luego en el seminario mayor de Dax, en 1819. Dejó los estudios y se convirtió en secretario del director del seminario de Larresore. En el 1823, fue ordenado sacerdote en la catedral de Bayona y durante un breve tiempo se hizo cargo de la parroquia de Cambo, donde trabajó con ardor que sería característica de su vida, y con fuertes convicciones antijansenistas. Se distinguió por su caridad hacia los pobres, la asistencia asidua a los enfermos, la predicación, sobre todo invitando a los fieles a recibir la eucaristía.

En 1825, fue nombrado profesor de Filosofía y Rector del seminario diocesano de Bétharram, con el fin de darle un nuevo impulso. Al cerrarse el seminario en 1831, quedó abierto el adjunto santuario y se le encomendó la dirección espiritual del noviciado de las religiosas Hijas de la Cruz. Decidió entonces fundar una nueva congregación religiosa que ayudara al clero parroquial, atendiera colegios y seminarios y otros apostolados similares. San Juana Isabel Bichier des Ages, fundadora de las Hijas de la Cruz, le animó en su proyecto.

Fundó la Congregación de Sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús de Bétharram, que tuvo su aprobación canónica en 1841, y que tiene la misión de ayudar en las parroquias, colegios y seminarios, a pesar de las reticencias que en un principio mostró el obispo de Bayona; pero al enviarle como profesor de Teología del seminario de Bayona, y ante su pronta obediencia, el obispo decidió apoyar su fundación. A raíz de unos Ejercicios Espirituales, en Toulouse fue el artífice de la elevación sacerdotal del Seminario Mayor de Bétharram. La fama de su bondad se difundió mientras vivió. "Los enfermos, afirmaba, lejos de ser un peso, son, no lo olvidemos, la bendición de las comunidades". "Lo que indujo a retirarme a Bétharram, decía, fue la vista de la poca obediencia del sacerdote al obispo y el deseo de combatir tan gran mal...". Como superior general, fue un ejemplo de energía y valor apostólicos hasta su muerte en Bétharram de una parálisis progresiva que durante diez años tuvo diferentes fases. Su Congregación, a su muerte, era muy exigua, (sólo tenía 100 miembros) y su difusión era escasa, sólo en algún lugar de Francia y en Argentina, donde si tuvo una fuerte presencia. Actualmente el número de sus miembros ha crecido considerablemente y su presencia está en varios países.
INDICE



Santa MARÍA DOMINICA MAZZARELLO. (1837-1881).


Martirologio Romano: En Nizza Monferrato, del Piamonte, en Italia, santa María Dominica (o Dominga) Mazzarello, fundadora, junto con san Juan Bosco, del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, dedicadas a la instrucción de niñas pobres. Sobresalió por su humildad, prudencia y caridad

Nació Mornese (Alessandria), en el seno de una familia de granjeros; su infancia transcurrió en el campo donde alimentó una profunda vida de piedad; su padre influyó mucho en la formación de su personalidad. Ingresó en la Pía Unión de María Inmaculada, asociación mariana surgida por la propuesta de algunas jóvenes de Mornese y cuyo reglamento había sido redactado por don José Frassinetti. Ingresó en esta asociación por indicación de su director espiritual don Domingo Pestarino, que fue su confesor durante 27 años. Quiso consagrarse por entero a Dios, pero contrajo el tifus, asistiendo a unos familiares enfermos, y fue entonces, cuando tuvo la visión de que Dios tenía otros proyectos para ella. Abandonó el trabajo del campo y aprendió a coser en una sastrería para después enseñar a las jóvenes y dedicarse por entero a su formación. Aprendió a leer y a escribir a los 35 años.

Poco a poco otras mujeres se unieron a ella en un modesto taller de costura, y, sucesivamente en un internado y en un oratorio festivo y así nació el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora en 1872. Bajo la dirección de san Juan Bosco el Instituto recibió una estructura regular y estado jurídico y comenzó su trabajo entre las niñas como los salesianos lo hacían para los chicos. Su director espiritual se hizo salesiano. En el 1874, fue obligada a ser superiora general. La casa madre se traslado de Mornese a Nizza Montferrato en 1879, y el Instituto se extendió por Francia, Uruguay y Argentina. Fue una mujer llena de amor y bondad, que se dio a sí misma a todos los que la rodeaban. Su sencillez de vida sigue siendo fuente de inspiración para muchos educadores. Para ella vivir era favorecer a las jóvenes. Después de una larga enfermedad murió de pleuresía en Nizza Montferrato, llena de méritos.
INDICE



OTROS SANTOS DEL DÍA:


Santas Justay Henedina. M. c. 130.
Martirologio Romano: En Cerdeña, conmemoración de santas Justa y Henedina, mártires

Mártires en Cerdeña, durante la persecución de Adriano. En la mayorá de los santorales se añade a santa Justina.


Santos Víctor y Corona M. c. 176.

Martirologio Romano: En Siria, santos Víctor y Corona, mártires, que sufrieron juntos el martirio

Eran marido y mujer, fueron martirizados, según parece, en Siria, durante el imperio de Antonino. Víctor que era soldado, fue descuartizado entre dos árboles como ella, sin duda se la llamó “corona” porque se mereció la corona del Cielo; sus Actasestán llenas de particulares poco fiables.

Otros autores afirman que Corona era la joven esposa de un compañero de armas, y que animaba en el tormento para que perseverara en la fe a Víctor. Corona murió atada entre dos árboles y Víctor decapitado.


San Isidoro de Quío. M. 251.

Martirologio Romano: En la isla de Quío, en el mar Egeo, san Isidoro, mártir, que, según la tradición, fue arrojado a un pozo

Mártir en Quío durante la persecución de Decio. Se dice que fue soldado de la flota de Numerio y se encargaba de distribuir la soldada a los compañeros. Por envidia lo denunciaron como cristiano. Sufrió largo interrogatorio y luego confesó valientemente su fe. Fue arrojado en un horno encendido, luego atado a la cola de un caballo y por último decapitado. Es el único mártir de este nombre.


San Poncio de Cimiez. M. 258. Martirologio Romano: En Cimiez, en la Provenza, san Poncio, mártir

Nació en Roma y se convirtió al cristiano en tiempos del papa san Ponciano, oyendo cantar maitines. Distribuyó sus bienes entre los pobres y se refugió en Cimiez, Niza, donde se dice que fue nombrado obispo de Cimiez. Murió decapitado en Niza. 

Una tradición local explica que, huyendo de sus perseguidores, Poncio llegó a Barcelona y que, al ver tanta miseria y enfermedades entre la población, se puso a preparar pócimas con hierbas curativas que conocía bien, por tal de remitir los dolores. De esta manera, se ganó el respeto y la admiración de los barceloneses que a partir de ese momento comenzó a celebrar una feria de hierbas en su honor. San Ponce se convirtió así en patrón de los herboristas y apicultores, el dia de su festividad, el 11 de mayo tienen lugar por toda Cataluña ferias donde se vende miel, hierbas curativas y aromáticas y frutas confitadas.

Sus reliquias fueron llevadas al monasterio de Tomeres, en 937, y dieron nombre a la ciudad, que lo cambió por el de San Poncio de Tomièiras. EL obispo Valeriano de Cimiez escribió en el siglo V algunos sermones sobre el obispo Poncio y los milagros acaecidos por su intercesión. Sobre la abadía se levantó más tarde la catedral de San Poncio de Tomeres.



San Poncio de Pradleves. s. III.
Soldado de la Legión Tebana que habría escapado a la masacre y colaboró con san Constancio en la evangelización de la región comprendida entre los torrentes Grana y Maira en Pradleves en Cúneo en Italia. Luego moriría mártir.

San Ampelio M. c. 410.


No se sabe a ciencia cierta la existencia de este santo. Herrero de Egipto, dejó un día todo y se adentró en el desierto en uno de aquellos cenobios del siglo V, que se encontraban en Tebaida. Allí puso su oficio al servicio de sus hermanos. Se cuenta que un día mientras estaba haciendo un trabajo en el yunque, se presentó una mujer bellísima, y Ampelio, tentado, y dándose cuenta de ello, continuó trabajando, hasta que la mujer se convirtió en un diablo y se marchó.

Como el santo eremita haya llegado a Liguria, es desconocido; se estableció en Bordighera y allí continuó con su vida penitente y de oración, obrando muchos milagros. Sus reliquias se encuentran en el convento de San Esteban de Génova. Patrón de Bordighera (Imperia).


San Abrúnculo de Langres. M. 488.

Martirologio Romano: En Arvernia (hoy Clermont-Ferrand), en Aquitania, san Abrúnculo, obispo, quien, expulsado de su sede de Langres por Gundebaldo, el rey de los burgundios, estableció su residencia entre los habitantes de Auvernia

(Nota: El Martirologio Romano repite dos veces la entrada de san Abrúnculo de Langres, una vez el 4 de enero y otra el 14 de mayo). (Ver 4 de enero).


San Constancio de Vercelli. M. c. 541.

XIIIº Obispo de Vercelli, sucesor de san Eusebio II, hacia el 530. Fue insigne poeta de la memoria de los santos locales. Su memoria ha desaparecido del calendario litúrgico diocesano.

San Eremberto de Toulouse. M. c. 674.

Martirologio Romano: En el monasterio de Fontenelle, en Neustria (hoy Francia), san Eremberto, que, habiendo sido obispo de Tolouse, abrazó después la disciplina monástica

Nació en Wocourt cerca de Poissy, en Seineet-Oise (Francia). Se hizo benedictino en Fontenelle (640) y allí recibió el hábito de manos de san Wandregisilo. no disfrutó mucho tiempo de la paz del claustro, pues el rey Clotario III le nombró pronto obispo de Toulouse (c. 656); ejerció esta misión eclesiástica durante 12 años.

Sólo ha llegado hasta nosotros el recuerdo de un incidente de su vida de obispo: se hallaba el santo de visita en casa de su hermano Gamardo, en su pueblo natal, cuando se declaró un incendio que amenazaba acabar con todas las casas. Eremberto se postró en la oración en la iglesia de San Saturnino y salió de ella con su cruz pastoral en la mano; inmediatamente cambió el viento, se extinguió el incendio y todo el pueblo acudió a la iglesia a dar gracias a Dios.

Tuvo que renunciar a su sede en el año 668 a causa de su mala salud; después se retiró a Fontenelle, donde permaneció hasta su muerte. Su hermano Gamardo entró más tarde, con sus dos hijos, en la abadía de Fontenelle, a la que hizo donación de todas sus posesiones.
INDICE

Páginas visitads:
Hagiopedia
Misa tridentina

VIDEOS
http://www.aciprensa.com/podcast/santo/mayo14matiasapostol.mp3


INDICE